El pasado 20 de abril, desde Forward tuvimos la oportunidad de organizar la I Edición del Taller de Defensa Personal «Resiliencia Defensiva», un evento que trajo consigo una profunda exploración de la resiliencia y las habilidades de autodefensa. En este artículo, recapitularemos los puntos más importantes abordados durante la jornada, más allá de enseñar técnicas físicas de autodefensa, nuestro enfoque se centró en fortalecer la capacidad de enfrentar amenazas emocionales, visuales, verbales y físicas en la vida cotidiana.
Recapitulación de los Contenidos Clave:
Visualización y Contacto Visual.
Importancia de tener un contacto global con la persona, incluyendo su cara y brazos, para evaluar la situación.
Identificar posibles rutas de escape y observar si hay otras personas alrededor que puedan brindar ayuda.
Visualización de puntos débiles en caso de un enfrentamiento o ataque directo, como los ojos, cuello, estómago, entre otros.
Distancia de Seguridad.
Mantener al menos un brazo de distancia proporciona una barrera de seguridad inicial.
En caso de acercamiento del agresor, se recomienda buscar separación mediante desplazamiento y tener en cuenta el propio espacio de comodidad.
Protección y Actitud.
Importancia de adoptar una postura cómoda y alerta, manteniendo los brazos en posición de defensa.
Mantener una postura protectora al hablar e intentar mantener la calma en situaciones de confrontación.
Ajustar la actitud según la amenaza percibida, adaptándose de manera proactiva a la situación.
Ahora, mientras reflexionamos sobre los conocimientos compartidos y la experiencia vivida, y dada la demanda de los participantes de esta primera edición, nos complace anunciar que estamos trabajando activamente en un segundo taller. Esta próxima entrega continuará fortaleciendo las habilidades de autodefensa y la resiliencia emocional de los participantes, proporcionando herramientas prácticas y conocimientos valiosos para enfrentar los desafíos cotidianos con confianza y seguridad.
¡Nos vemos en el siguiente!